La técnica de creep-feeding, o corral de alimentación en pastoreo para terneros, consiste en dar de comer a la cría junto a su madre, con el fin de engordar más rápido a los novillos y de restar exigencia a las vacas.
Ricardo Botero Carrera, Ingeniero Agropecuario con MSc en Nutrición Animal de la Universidad de Viçosa, aseguró que aplica la técnica de creep-feeding en su hacienda Zamorano para los novillos, logrando a los 8 meses de edad un peso de 250 kilos.
“Es un corral de restricción alimenticia solo para el ternero y donde la madre no puede entrar. Luego de los 8 meses, el ternero va a un sistema de pastoreo convencional con un suplemento proteico buscando obtener ganancias diarias de peso de un kilo por día”, explicó el especialista en nutrición animal.
Esta técnica permite la suplementación del ternero junto a la madre, donde además de consumir leche materna y el forraje del potrero, puede recibir algún tipo de suplemento en su comida.
Como lo explica el agrónomo argentino Hugo Héctor Carreras, los predios pueden adoptar esta técnica para mejorar las ganancias de peso diarias de los terneros, especialmente en épocas donde no hay suficiente disponibilidad de pastos.
Los beneficios de esta práctica son muchos:
1.El ternero puede ganar más peso al destete, entre 20 y 35 kilos más, y facilita que este se haga de forma precoz.
2.Se pueden cubrir deficiencias en nutrientes, ocasionadas por la interrupción del consumo de leche de la madre o de la baja producción de forraje.
3.El estrés del ternero disminuye y facilita su adaptación para entrar al potrero con otros animales.
4.El potencial genético de crecimiento se expresa en su máxima expresión porque el animal está mejor alimentado.
5.Eleva la producción de carne por hectárea con el incremento de la carga animal sin afectar la fertilidad de las vacas ni el ritmo de aumento de peso de las crías.
6.Las madres sienten menos exigencia de producir gran cantidad de leche.
La implementación del creep-feeding no necesita de instalaciones sofisticadas, como lo explica el agrónomo especializado en ganadería. El requerimiento principal es que deben permitir el libre acceso de los terneros a los comederos, impidiendo que las madres entren con ellos.
Esto se logra con un corral que tenga una entrada de un metro de alto, por la cual solo pueden ingresar las crías. Se puede hacer colocando un travesaño entre 2 postes o con alambres, pero sin electrificar las cercas porque pueden provocar un rechazo de los novillos.
La instalación se debe hacer dentro del potrero donde pastorean las vacas y cerca de los bebederos o bajo las sombras. Dentro del corral, se colocan los comederos garantizando suficiente espacio para cada animal.
Para lograr buenos resultados, se debe comenzar el consumo tan pronto como ingresan los terneros, y se recomienda que se inicie el suplemento a los 60 días o con un peso entre los 70 y 120 kilos.
Las crías se acostumbrarán a consumir dentro de estos corrales, porque sus madres estarán cerca. También se puede permitir el acceso de las vacas durante los primeros días para que le enseñen a los novillos o incluso con otros terneros que ya estén habituados a consumir el suplemento.
Fuente: Engormix.com