En el marco de la primera reunión del año de la Comisión de Balance Hídrico, distintos ministerios en coordinación con el Sistema Nacional de Emergencias (Sinae) comenzarán a trabajar en las previsiones para el segundo semestre del año, y las posibles afectaciones que sufrirá el país ante el evento climático La Niña, con frío intenso en el invierno y altas temperaturas y sequía en el verano.
Consultado por El Observador, el director del Sinae, Fernando Traversa, afirmó que no se trata de una reunión especial, sino que al igual que sucede con otros fenómenos se trata de recabar información para prevenir posibles efectos. «Nos preocupa el tema como nos preocupan todos los riesgos» que pueda enfrentar el país, dijo. «Estamos trabajando con lo que pueda llegar a acontecer en el segundo semestre del año, nucleando información para trabajar e ir tomando precauciones», señaló Traversa.
Algunas intendencias ya prevén acciones en ese sentido. En el caso del departamento de Paysandú,
según informa esa comuna en su web, el Centro Coordinador de Emergencias Departamentales (Cecoed) trabaja en la identificación de lugares donde a partir de este fenómeno climático pueda haber falta deagua, tanto para consumo animal como humano, con especial atención en las escuelas rurales.
Según explicó a El Observador el director del Cecoed de Paysandú, Mario García, se trata de adelantarse a los problemas «como forma de mitigarlos».
Por otra parte, se afirma que se buscará que productores limpien tajamares y pozos, y que se analiza además, en caso de ser necesario, la posibilidad de «suministrar agua a pequeños productores a través del uso de camiones cisternas de empresas privadas».
Otros de los posibles problemas son la falta de alimento para los animales y los incendios forestales. Así, según dijo García, se planea habilitar el pastoreo en caminos vecinales; y se hará más inspección, con intimación a los dueños y limpieza de terrenos baldíos con basurales.
Prónosticos
«Lo que se espera para el invierno y comienzo de la primavera, respecto a la temperatura del agua de mar en el Pacífico tropical es que esté en promedio en el entorno de 1º por debajo de lo normal», dijo a El Observador el vocero del Instituto Uruguayo de Meteorología (Inumet), Jorge Nusa. Es una «Niña afianzada», dijo pero no una «Superniña», aclaró.
Eso trae como consecuencia que en los próximos tres meses (mayo, junio, julio) haya en la región una disminución de las precipitaciones y que las temperaturas puedan estar un poco por debajo de lo que es habitual.
Para el caso de los departamentos de Artigas, Salto y Rivera, según prevé el equipo de Tendencia Climática del Inumet, hay un 40% de probabilidad de que las lluvias estén por encima de lo que es habitual.
En cuanto a la temperatura, habrá «dos grandes contrastes», explicó Nusa. Se prevé entonces que para la franja que rodea la frontera con Brasil, desde Artigas a Rocha, la temperatura esté un poco por encima de lo normal. En cambio, en el litoral oeste, fundamentalmente en la franja del norte de Soriano, Río Negro, Paysandú y Salto, las temperaturas serán más bajas de lo habitual. En el resto del país, serán normales.
En comparación con el invierno pasado, «la sensación es que a esta altura del año la sensación era más agradable», señaló el meteorólogo. Afirmó que esto se debe a que a partir de las últimas precipitaciones de abril las temperaturas fueron bajando y las masas de aire frío ingresaron más libremente al país.
Fuente: El Observador Agro
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